Compilación de escritos breves de Proclamación y Evangelismo, para quien le sirva, escritos a mediados de 2016 al 2018 y compartido de manera gratuita. Citas tomadas de La Biblia de las Américas (LBLA) (1997). Les saluda el hermano Víctor.
Primera Parte
El Señor es amor y lo manifiesta en que siendo Él el ofendido por cuanto todos pecaron, Dios se hizo hombre, para identificarse con el ser humano en sus debilidades, en sus necesidades y limitaciones, pero con la diferencia en que fue concebido sin pecado, así Jesús se hizo obediente hasta la muerte de cruz, resucitando al tercer día y está a la derecha del Padre, para que depositando confianza absoluta en Cristo, haya reconciliación verdadera con el Padre y Vida eterna junto a su Hijo Jesús el Cristo.Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en El, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque Dios no envió a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por El (Juan 3:16-17)
"Pero Dios demuestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros" (Romanos 5:8). Llegará el día en que cada persona rendirá cuentas ante Dios. Pero mientras tanto, el amor de Cristo es verdadero (pues dio su vida), de tal manera que si aceptas Su sacrificio como suficiente para salvación y le sirves por fe durante toda tu vida, Él te salva. Entonces en el día postrero rendirás cuenta para salvación y no para condenación.
Segunda Parte
Es ilógico hablar de salvación si no hay condenación. Es ilógico hablar de un Dios amoroso y justo, si no hay un juicio y castigo por la maldad de los impíos, y salvación de los santos en Cristo. Recuerden, si se habla de salvar, entonces es lógico deducir que hay un peligro real, esto es del castigo eterno (suena doloroso, Mateo 25:31-46) por transgredir la Ley de Dios. Cristo Jesús, Dios hecho hombre, el Salvador por excelencia pagó ese gran precio de morir en la cruz sin culpa de pecado, perfecto en obediencia y sin mancha, para que creyendo en El, apartados de toda clase de pecados con Su poder, haya una real reconciliación en paz, teniendo vida eterna junto a Cristo: "Porque hay un solo Dios, y también un solo mediador entre Dios y los hombres, Cristo Jesús hombre" (1 Timoteo 2:5). Quienes reciben a Cristo por fe en sus vidas, se reconcilian, teniendo paz con el Padre por haberse arrepentido verdaderamente y no la ira que merecen por haber pecado: "Por tanto, habiendo sido justificados por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo" (Romanos 5:1). Dios les bendiga.Tercera Parte
La fe nace del oír, escuchando la Palabra de Cristo (Romanos 10:17), mas no todos obedecen al Evangelio, porque en sus méritos voluntariamente resisten la obra de Dios (Hechos 7:51), pues, muchos son los llamados, mas pocos son los escogidos (Mateo 22:14), porque son muchos los que rehúsan creer y son pocos los que creen en el Unigénito Hijo de Dios (Juan 5:40). Dios insta por gracia previa a todo hombre al arrepentimiento (Romanos 2:4) en medio de una predicación y le da muchas oportunidades durante su vida. Todo está si resiste la gracia o si se deja guiar por la gracia previa de Dios. Todo aquel que crea en Jesús tendrá vida eterna junto a Él, si rehúsa a creer en Él será condenado lejos de Él. Las buenas obras no salvan al ser humano, porque aunque sean con buenas intenciones, si se obra con una fe equivocada, esto es, no basadas en Cristo, son abominación ante Dios. La salvación no es posible obtenerla mediante los méritos humanos, ni por tener fe en otras religiones e ídolos, sino (por gracia) por medio de la fe en el mérito perfecto que hizo Cristo en la cruz del calvario como suficiente para salvación sin agregar nada más, el cual, es aceptado delante de Dios Padre, pues Jesús no pecó, pero el ser humano sí y desde el principio, entonces leamos lo siguiente: "Todos nosotros somos como el inmundo, y como trapo de inmundicia todas nuestras obras justas; todos nos marchitamos como una hoja, y nuestras iniquidades, como el viento, nos arrastran" (Isaías 64:6). La Gracia es la ayuda divina que el ser humano no merece por sus pecados, pero aún así Dios se complace en otorgarla diariamente a todos los pecadores instándoles al arrepentimiento y a ejercer fe en cada momento en que escuchan el Evangelio, entonces Dios por Su Gracia previa regala la salvación al hombre como un don inmerecido por medio de la fe en Cristo, no por lo que el ser humano en sí mismo realice (obras) y ni siquiera debiera jactarse: "Porque por gracia habéis sido salvados por medio de la fe, y esto no de vosotros, sino que es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe" (Efesios 2:8-9).Cuarta Parte
Hay muchos incrédulos que por amor y deleite al pecado, es que voluntariamente niegan a Dios, por cuanto Satanás el dios de este mundo les tiene cegado el entendimiento (2 Corintios 4:4) ofreciendo entretenimiento con engaños alternativas religiosas, tecnología, consumismo, amor al dinero, depravación sexual, verdades relativas, vicios e incluso una verdad tergiversada, entre muchos otros, para desviar la atención a las personas del amor y la verdad de Dios, así para que no les resplandezca la luz de Cristo. Dios por Su benignidad concede por medio de Su Santo Espíritu convencimiento de pecado y arrepentimiento (Romanos 2:4), pero es la contaste incredulidad humana influenciada por la naturaleza pecaminosa que aun conociendo la verdad rehúsa voluntariamente no seguir a Dios, no queriendo ejercer fe y por cuanto resisten al Espíritu Santo (Hechos 7:51) y Su obra redentora. Es nuestra tarea como Iglesia de Jesús el Cristo el clamar por arrepentimiento para los incrédulos (porque muchos estábamos en esa misma condición) y predicando el Evangelio de paz (Efesios 6:15), Su amor, reconciliación de Dios les resplandezca la luz de la Verdad en sus corazones y decidan con la ayuda del Espíritu Santo seguir a Cristo por fe, así ser nuevas criaturas. Por otro lado, para ti que lees, la paga del pecado es muerte, y muerte implica separarse de Dios. Mientras tanto que estés vivo, busca a Cristo Jesús mientras pueda ser hallado, huye de esta generación perversa, despójate de los deleites temporales y engañosos que ofrece este sistema influenciado por el adversario, porque si mueres en tus pecados no confesados, sin haber servido con amor y con base a la fe en Cristo durante toda tu vida, quedarás separado para siempre de Dios en el Castigo Eterno (Mateo 25:31-46) después del día del juicio y no hay vuelta atrás. El Señor si perdona, pero a quienes le buscan de corazón (de verdad), a quienes corrigen sus caminos y sus pensamientos (por la gracia de Dios y Su Palabra) durante toda la vida de peregrinación en esta tierra hasta la muerte. Los caminos del hombre y sus pensamientos siempre se desvían para perdición, ya que están viciados de pasiones desordenadas pecaminosas, pero los caminos de Dios y sus pensamientos (Como Dios actúa en cada situación y Su Palabra infinita en entendimiento) siempre serán superiores e ilimitados para el intelecto humano y para salvación de los que creen, Jesús es el Camino de Salvación por excelencia que Dios dejó a la humanidad (Juan 14:6), por eso es mas sublime. "Porque la paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro" (Romanos 6:23):Buscad al Señor mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cerca. Abandone el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase al Señor, que tendrá de él compasión, al Dios nuestro, que será amplio en perdonar. Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos —declara el Señor (Isaías 55:6-8).
"Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre sino por mí" (Juan 14:6).
Quinta Parte
Si le cuesta cambiar su mal carácter, déjeme decirle que en Cristo se puede cambiar a un carácter mas apacible (es un proceso que dura toda la vida), pero es necesario reconocer este pecado (el mal carácter) y tener la humildad suficiente para depender de Jesús. Si lo buscas de corazón, lo hallarás, y no como una falsa ilusión, sino que en tu vida se reflejará hacia los demás. El Señor le dijo esto a los israelitas desobedientes, esperando a que se arrepintieran de sus malas obras: "Me invocaréis, y vendréis a rogarme, y yo os escucharé. “Me buscaréis y me encontraréis, cuando me busquéis de todo corazón" (Jeremías 29:12-13). Lo que indica que la intención de Dios es que toda persona que le invoca y ejerza fe en Él, lo haga de corazón (de verdad). En cuanto al buen carácter, Jesús insta a todos a que aprendan de Él, porque tenia ese buen carácter que da verdadero descanso al alma humana, pero con la condición de tomar su yugo, servirle de verdad (de corazón) y para esto es necesario conocerle a través de Las Sagradas Escrituras: "Tomad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y hallareis descanso para vuestras almas" (Mateo 11:29). Dios da gratuitamente la salvación para el humilde, aquel que reconoce que es merecedor del castigo eterno por haber pecado, que recibe con solicitud a Cristo Jesús el Señor (Romanos 10:9-13) y Dios Todopoderoso en su vida, por haber creído, todo por gracia de Dios, tendremos reconciliación y paz (Romanos 5:1) para con el Padre Celestial, y obedeciendo por amor gozaremos de las promesas y bendiciones como sus hijos. Dios no rechaza el corazón entristecido y humillado (Salmos 51:17). Su benignidad nos guía al arrepentimiento (Romanos 2:4), por que es necesario apartarse de pecado (1 Pedro 3:11). Mientras tanto que estés vivo, busca por fe a Cristo Jesús mientras pueda ser hallado, despójate de los deleites temporales que ofrece este sistema, que esta influenciado por el adversario, porque si mueres en tu pecado (sin Cristo) quedaras separado para siempre de Dios y estarás en el Castigo Eterno y no hay vuelta atrás (para siempre). La paz de Cristo reconforta y reconcilia el corazón del pecador, cuando este se arrepiente renunciando a su pecado creyendo y confiando en Cristo Jesús y en Sus Enseñanzas. Aleluya! El Señor les bendiga.https://estudiandosuescritura.blogspot.com/
Nota:
Extraído del documento Proclamación de las Buenas Nuevas de Salvación y adaptado por mi, Saludos.